"SOY JOVEN, SEÑOR"


Soy joven, Señor, y quiero vivir con fuerza y alegría;
soy joven y quiero estrujar mi vida y llegar hasta el fondo;
soy joven y, la verdad, Señor, no sé lo que es vivir a veces;
soy joven y busco caminos, aunque no he encontrado el sendero cierto.

Tú amas la vida, Señor Jesús, y quieres al joven en pie, firme;
amas la vida y has roto las ataduras de la muerte, resucitando;
tienes Palabras de vida eterna para el corazón del hombre,
y le has dado el pan de vida para que camine con valor.
Señor de la vida: quiero vivir desde el centro de mi ser.
Señor de la vida: quiero ser feliz y mantener mi dignidad.
Señor de la vida: quiero enraizar mi vida en tí, que eres Amor.

Yo sé, Señor, que hay cosas que matan y llevan a la tumba;
yo sé que cuando vivo mi egoísmo con rabia y desenfreno, me estoy muriendo;
yo sé que cuando me entrego a la evasión del juego, estoy muriendo;
yo sé que cuando huyo en alas de la velocidad, estoy muriendo;
yo sé que cuando vivo de cosas, de objetos... ¡me estoy muriendo!.

Quiero vivir, Señor: hacer de la verdad el camino para mis pasos.
Quiero vivir, Señor: hacer del amor limpio la norma de mi conducta.
Quiero vivir, Señor: hacer de la libertad espacio para mi búsqueda.
Quiero vivir, Señor: hacer del servicio la constante de mi vida.
Quiero vivir, Señor: hacer de la reconciliación un camino de paz.
Quiero vivir, Señor: hacer de la esperanza una fuerza hacia adelante.
Quiero vivir, Señor: hacer de la oración un lugar de encuentro contigo.
Quiero vivir, Señor: hacer de la justicia un camino hacia el hermano herido.
Quiero vivir, Señor: hacer de la humildad la base de cuanto soy.

Aquí me tienes en busca del bien y la aceptación de tus mandatos.
Aquí me tienes en lucha contra el mal y en decisión de vivir el bien.
Aquí me tienes en tensión con mi propia vida, con mi corazón.
Aquí me tienes con ganas de ser auténtico, sencíllamente yo.
Aquí me tienes junto a Tí, Señor Jesús, Señor de la VIDA.

Así sea.