Hablemos con nuestro Padre

Hola a todos.

Hoy quisiera reflexionar sobre la oración, ese "instrumento" tan eficaz que nos permite hablar con nuestro Padre del cielo, de una manera directa y personal, sin olvidar esa eficacia aún mayor de la oración comunitaria.

Es verdad que en esta sociedad que estamos construyendo, metámosnos todos, cada vez hay menos espacio para el sociego, elemento fundamental para el encuentro con Dios y así poder llegar a esa contemplación, comunicación directa con Él, que nos permite hablar con ese Amigo que nunca falla.

Pero eso no justifica, que no podamos conseguirlo; que podamos buscar esos momentos, situaciones y lugares idóneos para el encuentro.

Quizás sería importante, que Dios supiera, antes de nada, de nuestro deseo, de nuestra voluntad; y si fuera ésta positiva, "entre los dos", se conseguirá ese momento; porque no olvidemos que Jesús está siempre a nuestro lado, deseoso de acompañarnos y ayudarnos, sabedor de nuestras debilidades, para apoyarnos siempre y hacernos más ligeras nuestras cargas.

Debemos entonar siempre en nuestras acciones un "nosotros", con lo que le decimos que todo es "en Él, para Él y por Él".

La oración es nuestra conversación con Dios, es, llevar una Verdadera Vida en Dios.

No dejemos de orar, de hablar con Dios, de pensar continuamente en Él; ese Padre del cielo que nos quiere tanto y nos brinda todo su Amor.

A la vez, no podemos olvidar a nuestra Mamá del cielo, María, nuestra intercesora, que también nos quiere tanto, y que igualmente nos brinda todo su Amor, descubriéndonos al Padre. Ave María Purísima.

Que tengais un buen dia.

En los dos corazones.