Hoy he sido maltratado, cruelmente azotado

160. Hoy he sido maltratado, cruelmente azotado

25 de Enero de 2013 (10:00 p.m.)

Te estaba esperando, tardaste un poco para nuestra cita de amor; en fin, lo importante es que llegaste; hubieras herido mi Corazón si te hubieses acostado sin venir a la capilla para encontrarte cara a cara conmigo.
Ven, acércate; los latidos de mi Corazón se aceleran con tu visita; has menguado mi soledad, has venido a reparar las injurias que recibo de muchos de mis hijos, porque hoy he sido maltratado, cruelmente azotado.
{Perdóname, Señor, por no haber venido más temprano a visitarte, te descuidé un poco; la alegría de recibir la pintura de San José, ya terminada, captó mi atención; me olvidé de nuestra cita de amor. Dime qué he de hacer para consolarte y sanar tus heridas, todo lo quiero hacer por Ti.} 
Repara la frialdad con que soy tratado, repara el desamor que recibo de las criaturas, adora mis Sagradas llagas; ellas son manantial de gracia y Misericordia, ellas son la gran prueba de amor por ti y por todos los hombres.
No te separes de mi lado, quédate algunos minutos; tu presencia ya es consuelo para mi agonizante Corazón.
{Tus palabras, Señor, son bálsamo de paz, son medicina para mi corazón; tu amor y tu Misericordia me sorprenden cada vez más; cómo dejarte solo si Tú eres mi todo, eres la única razón de mi existir. Gracias porque me comprendes, pero enséñame el camino que me lleva al Cielo; temo perderme, quiero serte siempre fiel.}
Cómo no hablarte al corazón y demostrarte que estoy vivo, que me doy en plenitud cuando encuentro almas generosas que lo han dejado todo por Mí; quedarme silencioso sería darle tregua al enemigo cuando se ha llevado consigo muchas almas al infierno; consuela mi agonizante Corazón viviendo en santidad, alejándote por completo del mundo; decide caminar por el camino angosto y pedregoso que te lleva al Cielo, despréndete de ti mismo y de las criaturas y verás el avance en tu vida espiritual; comprenderás que las cosas del mundo son veneno letal para el alma.
{Solo con tu ayuda podré caminar en pos de Ti; solo con tu auxilio seré tu siervo, tu súbdito de amor que con una vida de virtud te dé gloria.}

FUENTE: DIARIO ESPIRITUAL AÑO 2013 de la Comunidad de Siervos Reparadores.