Quiero que siempre estés conmigo

372. Quiero que siempre estés conmigo

14 de Septiembre de 2013 (5:10 p.m.) 

Deja que el fuego, que consume mi Sagrado Corazón, prenda en tu interior y te fusiones conmigo. Ya no quiero que te separes de Mí ni un solo instante; por eso, deja que descienda, en tu corazón, bajo las especies consagradas del pan y del vino; pero, antes de recibirme, sé sumamente cuidadoso, vigila para que no haya pecado alguno, manchas que opaquen mi luz divina y lastimes mi Cuerpo adorable.

Eres apóstol de mi Sagrado Corazón, y debes mantener tu alma luminosa como una estrella.

El sacramento de la confesión es sacramento curativo, liberador. Acude al tribunal de mi Misericordia Divina cada vez que caigas en pecado; lluvia fresca, torrencial de mi amor, descenderá sobre ti; sentirás paz, alivio.

Eres apóstol de mi Sagrado Corazón, y te pido que repares el Corazón Inmaculado de mi Madre, porque muchos de mis hijos no la aman, muchos de mis hijos la desprecian; no le rinden los homenajes que, como Madre de Dios y Madre de toda la humanidad, se merece.

Eres apóstol de mi Sagrado Corazón y recuerda que no puedes desligar la devoción al Corazón Inmaculado de mi Madre. Son dos Corazones que permanecen unidos el uno al otro.

Eres apóstol de mi Sagrado Corazón, y te pido que emprendas el camino de la reparación dejando las cosas del mundo, cortando con tus vicios y esclavitudes; esforzándote por sacar apegos de tu corazón que impiden que tu amor por Mí sea pleno.

FUENTE: DIARIO ESPIRITUAL AÑO 2013 de la Comunidad de Siervos Reparadores.